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Portabebés
El porteo, como todos sabéis, es un sistema de transporte que asegura un contacto constante entre el bebé y el adulto.
Para que pueda aportar todos sus beneficios al bebé, el portabebés debe respetar la fisiología y fisionomía del peque.
Para un bebé, ser porteado aporta una larga lista de beneficios.
El contacto es esencial para la auto-organización física, sensorial y sensomotriz y relaciones sociales del bebé.
Les aporta sensación de seguridad, ya que cuando nacen reconocen el cuerpo de su madre como su hábitat.
Al sentirse seguro, el bebé está tranquilo y relajado, no activa sus sistemas de alarma. De esta forma evita el estrés, y dedica esa energía a crecer.
También mejora la calidad del sueño, ya que está relajado y puede conciliar el sueño con más facilidad teniendo más oportunidades de dormir.
Consiguen un mayor bienestar físico ya que consumen menos oxígeno y gestionan más eficazmente el gasto energético.
Para las mamás también es un alivio ya que...
Por otro lado, la ausencia del estrés te da la seguridad de que su ritmo cardíaco será estable.
No sólo por ellos, sino además por las mamás que potenciaran sus hormonas al contacto con el bebé y dispondrán de más oxitocina y prolactina.
El porteo ayuda a que el bebé y los miembros de su familia tengan un vínculo más fuerte.
El bebé se siente protegido.
Y tú te sientes más tranquila/o sabiendo que está bien.
No obstante, aunque lleves al bebé contigo puedes hacer de todo ya que dispones de las manos libres y es cómo es un método cómodo y ligero, podrás llevar a tu bebé a donde vayas.
Nuestros portabebés...
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